Colección especial: Día Mundial sin Tabaco

El pasado 31 de mayo se celebró el Día Mundial sin Tabaco. Instaurado por la Organización Mundial de la Salud, su objetivo es atraer la atención sobre los riesgos para la salud asociados al uso de tabaco y sobre las medidas que pueden tomarse para reducir su consumo en el mundo.

Para apoyar el abandono del hábito de fumar, Cochrane presenta una Colección Especial actualizada que destaca una selección de revisiones Cochrane nuevas o recientemente actualizadas que abordan la adicción al tabaco en la población general.

Este artículo se centra en una revisión Cochrane sobre una intervención médica (agonistas parciales de los receptores de nicotina para dejar de fumar) y analiza lo que dicen las pruebas disponibles en relación con su efectividad.

Cuando las personas dejan de fumar experimentan ansiedad por fumar y desagradables cambios de humor. Los agonistas parciales de los receptores de nicotina tienen como objetivo reducir estos síntomas de abstinencia y el placer que las personas habitualmente experimentan al fumar. El más extendido de este tipo de fármacos es la vareniclina, disponible en todo el mundo como una ayuda para dejar de fumar. La citisina es un medicamento similar, pero solo está disponible en países de Centroeuropa y Europa del Este y a través de internet.

Un equipo de autores Cochrane de Reino Unido trabajaron con el Grupo Cochrane de Adicción al Tabaco y actualizaron su revisión sobre la eficacia de los agonistas parciales de los receptores de nicotina, incluidas la vareniclina y la citisina, para dejar de fumar. Los hallazgos provienen de 44 estudios que incluyeron a 25 200 personas.

La vareniclina a dosis estándar supuso más del doble de posibilidades de dejar de fumar, al compararla con placebo. Una dosis baja de vareniclina apenas dobló las posibilidades y redujo el número y la gravedad de los efectos secundarios asociados al uso del fármaco. El número de personas que dejaron de fumar con la vareniclina fue mayor que con bupropión o con tratamiento de reemplazo de nicotina. De acuerdo con las pruebas disponibles actualmente, los autores calcularon que la vareniclina proporciona un ex fumador más por cada 11 personas tratadas, en comparación con los fumadores que intentan dejarlo sin vareniclina.

Un foco clave de esta actualización fue investigar cualquier posible efecto secundario resultante del uso de este tipo de fármaco. Después de que la vareniclina estuviera disponible para su uso, surgieron dudas acerca de su posible vinculación con un aumento del estado de ánimo depresivo, el nerviosismo o el pensamiento y la conducta suicida en algunos fumadores. Sin embargo, las últimas pruebas de la investigación no apoyan que exista un vínculo entre la vareniclina y estos trastornos, aunque las personas con enfermedades psiquiátricas presentes o pasadas pueden presentar un riesgo ligeramente más elevado. Existen también dudas acerca de si la vareniclina podría aumentar ligeramente los problemas cardiovasculares en personas en riesgo de esta afección. De nuevo, las pruebas actuales sugieren que no están causadas ni son empeoradas por la vareniclina; sin embargo, un futuro estudio que se publicará a finales de 2016 debería proporcionar respuestas más claras al respecto.

«La vareniclina es el agonista de los receptores de nicotina más utilizado. Actualmente presenta una advertencia de caja negra en el envase. Esta actualización Cochrane proporciona nuevas apreciaciones sobre los efectos adversos (los informes de casos individuales iniciales que vinculaban el fármaco a la conducta suicida no han sido confirmados por las pruebas científicas agrupadas)», afirmó Nicola Lindson-Hawley, uno de los autores de la revisión Cochrane. «Aunque es importante que los médicos sigan considerando las afecciones preexistentes al prescribir vareniclina, esta revisión confirma el éxito de la vareniclina como ayuda para dejar de fumar comparada con no utilizar medicación alguna».

Blogshots de revisiones Cochrane para el Día Mundial sin Tabaco: