Una nueva revisión Cochrane publicada muestra que cuando se fomentan las discusiones entre médicos y pacientes sobre la necesidad de recetar antibióticos para las enfermedades respiratorias agudas, se prescriben menos de estos fármacos. Esta práctica puede resultar útil en la campaña contra la resistencia antibiótica.
La toma de decisiones compartida entre facultativos y pacientes supone una parte importante de la atención centrada en el paciente. El proceso ideal es combinar las mejores pruebas procedentes de estudios sobre los daños y beneficios de una intervención con los valores y preferencias del paciente, como parte de una conversación con su médico de cabecera o profesional sanitario. Como resultado, el profesional sanitario y el paciente tomarán la decisión conjunta sobre los pasos a seguir.
Las infecciones respiratorias agudas como la tos, la infección del oído medio o la faringitis agudas se encuentran entre los motivos más frecuentes de visita médica, especialmente durante el invierno. Los profesionales sanitarios a menudo prescriben antibióticos para estos trastornos, a pesar de que existen pruebas de elevada calidad de que proporcionan pocos beneficios.
Existe una preocupación con respecto al constante uso excesivo de antibióticos, lo cual ha conllevado que algunas bacterias sean resistentes a sus efectos. Todo esto implica que los antibióticos ya no funcionarán para tratar enfermedades para las que solían ser efectivos. Esta evolución está considerada como una grave amenaza para la salud mundial.
Un equipo de investigadores Cochrane examinaron 10 ensayos de asignación aleatoria que implicaban a más de 1100 médicos de atención primaria y a unos 492 000 pacientes, principalmente de Europa. Los estudios evaluaban intervenciones como la formación de los médicos generalistas en habilidades comunicativas para averiguar las preocupaciones y las creencias de los pacientes acerca de la necesidad de antibióticos, sus daños y beneficios, y acordar el plan de tratamiento de forma conjunta. Algunos estudios también evaluaron el reparto de información por escrito sobre los antibióticos a los pacientes y el fomento de discusiones con los médicos sobre si son necesarios.
La revisión observó que la cantidad de prescripciones de antibióticos para las infecciones respiratorias agudas a las seis semanas de la consulta era menor en aquellos grupos que habían recibido la información y habían sido formados, en comparación con los grupos que no lo habían hecho. Según el análisis de los datos de ocho de los estudios incluidos, el 47% de los pacientes de los grupos control recibieron una prescripción, frente al 29% en los grupos en los que el médico de cabecera o el paciente habían sido informados. Los investigadores evaluaron la calidad de las pruebas en los efectos a corto plazo como moderada; los efectos a largo plazo son inciertos, ya que pocos ensayos midieron esta variable.
La profesora de Epidemiología Clínica Tammy C Hoffmann, del Centro para la Investigación en Práctica Basada en la Evidencia de la Universidad de Bond en Australia (Centre for Research in Evidence-Based Practice, Bond University) afirma: «Las pruebas de esta revisión muestran que se podrían prescribir menos antibióticos para infecciones respiratorias si hubiese más pacientes y médicos que tomaran decisiones conjuntamente. Es importante apoyar las discusiones de calidad entre profesionales sanitarios y pacientes con respecto al uso de antibióticos para que se puedan tomar decisiones informadas».
El coautor de la revisión, Peter Coxeter, también de la Universidad de Bond, añade: «Esta podría ser una manera sencilla de reducir los efectos de la resistencia antibiótica, pero necesitamos averiguar si este tipo de formación produce un efecto a largo plazo sobre la resistencia».
El Editor Jefe de la Cochrane Library, David Tovey, afirmó: «Esta revisión Cochrane aborda uno de los retos más urgentes de salud mundial a los que nos enfrentamos. El uso excesivo de antibióticos tiene consecuencias graves sobre cada paciente y sobre la sociedad en general. Algunos médicos creen que la presión para la prescripción de antibióticos proviene del paciente, pero esta revisión muestra que la toma de decisiones conjunta puede reducir su uso».
Referencia: Coxeter P, Del Mar C, McGregor L, Beller E, Hoffmann T. Intervenciones para facilitar la toma de decisiones conjunta en cuanto al uso de antibióticos para las infecciones respiratorias agudas en la atención primaria. Cochrane Database of Systematic Reviews 2015 Issue 11. Art. No.: CD010907. DOI: 10.1002/14651858.CD010907
Puede consultar la revisión en español aquí.