Prevalencia de SARS-CoV-2 en España

Estudios COVID-19
7 de julio de 2020 | Centro Cochrane Iberoamericano


Mensajes clave

  • La prevalencia de anticuerpos IgG contra SARS-CoV-2 es aproximadamente del 5% en España, con una gran variabilidad geográfica. 
  • Por lo menos un tercio de las personas con anticuerpos contra el SARS-CoV-2 eran asintomáticas.
  • Una prueba rápida de digitopunción de alta calidad podría ser una buena opción para los estudios seroepidemiológicos.
  • La prevalencia estimada es insuficiente para lograr una inmunidad de grupo, y esta no puede lograrse sin el daño colateral de una importante mortalidad en la población y la sobrecarga de los sistemas de salud.

Contexto

España es uno de los países europeos más gravemente afectados por la pandemia de COVID-19. La vigilancia epidemiológica de los casos confirmados de covid-19 sólo captura un porcentaje de todas las infecciones ya que hay casos que son asintomáticos. Sin embargo, una encuesta sero-epidemiológica de base poblacional puede cuantificar la proporción que ha estado expuesta a SARS-CoV-2 y, si los anticuerpos son un marcador de inmunidad total o parcial, puede cuantificar la población que permanece susceptible al virus. El Ministerio de Salud de España, junto con el Instituto de Salud Carlos III, han llevado a cabo un estudio sero-epidemiológico (estudio ENE-COVID) (1) con el objetivo de estimar la seroprevalencia de infección por SARS-CoV-2 en España, tanto a nivel nacional como regional. Este artículo describe los resultados de la primera ronda realizada entre el 27 de abril y el 11 de mayo de 2020.

Metodologia

En el estudio ENE-COVID19 se realizó un muestreo bietápico estratificado. El primer nivel de estratificación estuvo constituido por las provincias españolas y las dos ciudades autónomas. El segundo nivel de estratificación fue el tamaño de los municipios dentro de cada provincia. Dentro de cada estrato definido por la provincia y el tamaño municipal, se seleccionaron las secciones censales como unidad de muestro de primera etapa y los hogares de cada sección censal como unidades de segunda etapa. Se asumió una tasa cruda de prevalencia de anticuerpos anti SARS-CoV-2 del 5%. Con ayuda del Instituto Nacional de Estadística se seleccionaron 1500 unidades censales y en cada una de ellas se seleccionaron 24 domicilios. Se incluyeron todos los miembros del hogar para que la muestra tuviera participantes de los diferentes grupos de edad. Con ellos se estimó que se invitarian unas 90.000 personas para obtener unos 60.000 participantes. 

Para la medición de los anticuerpos frente a SARS-CoV-2 se utilizaron dos tipos de pruebas: a) una prueba rápida de inmunocromatografía que permite obtener resultados in situ; y b) una determinación de IgG mediante inmunoensayo quimioluminiscente de micropartículas que precisa venopunción. En cada visita a cada participante se le realizaba la prueba rápida de anticuerpos obtenida por digitopunción, y si la persona aceptaba, se realizaba también una muestra de sangre extraída por venopunción.

La seroprevalencia se estimó como la proporción de individuos con resultado positivo para la prueba rápida de anticuerpos o, en un análisis separado, aquellas personas que tenían un resultado positivo para el inmunoanálisis. En los análisis de sensibilidad restringidos a los participantes con resultados en alguna de las pruebas se estimó la seroprevalencia como la proporción de personas con un resultado positivo en ambas pruebas (enfoque más específico) o en sólo una prueba (enfoque más sensible).

Las estimaciones de las tasas de seroprevalencia de IgG frente a SARS-CoV-2 se realizaron asignando a cada participante un peso de muestreo inversamente proporcional a su probabilidad de selección, ajustado adicionalmente por la tasa de no respuesta específica según sexo, grupo de edad y nivel de renta relativo de la sección censal. Todos los análisis consideraban tanto el efecto de la estratificación por provincia y tamaño municipal, como el efecto de la agrupación por hogares y secciones censales, en el error estándar de la tasa estimada de seroprevalencia y en su correspondiente intervalo de confianza.

Información de interés

Se reclutaron 66.805 participantes: 61.075 recibieron la prueba rápida (75,1% de las 81.294 personas contactadas) y 51.958 recibieron el inmunoanálisis (63,9% de las personas contactadas). Entre el 27 de abril y el 11 de mayo de 2020 la seroprevalencia para todo el país fue de 5,0% (IC al 95% 4,7 – 5,4) por la prueba rápida, y de 4,6% (4,3 – 5,0) por el inmunoanálisis. No hubo diferencias por sexo. Hubo una menor prevalencia en los niños menores de 10 años (<3,1% con la prueba rápida). La seroprevalencia fue mayor en municipios más grandes y en los trabajadores de salud.

Hubo una importante variabilidad entre las provincias. En siete provincias en la parte central de España, incluyendo Madrid, la seroprevalencia fue mayor al 10% para ambas pruebas. En las provincias de la costa sólo Barcelona tuvo una seroprevalencia mayor al 5%. 

La proporción de personas con una prueba rápida positiva que eran asintomáticas fue de 32,7% (30,2 – 35,4) y de 28,5% (25,6 – 31,6) con una prueba de inmunoanálisis. En relación con el diagnóstico de covid-19 mediante PCR, entre el 87,6% y el 91,8% de los participantes que refirieron haber tenido una PCR+ al menos 2 semanas antes de la entrevista presentaron anticuerpos IgG.

Aunque la prueba de inmunoensayo tenía mejores características de rendimiento, la prueba rápida ofreció una información epidemiológica comparable y tuvo una mayor aceptación, menor coste y una implementación más fácil. Por lo tanto, una prueba rápida de calidad alta podría ser una opción adecuada para la realización de grandes estudios sero-epidemiológicos.

A pesar del alto impacto de la covid-19 en España, las estimaciones de la prevalencia siguen siendo bajas y son insuficientes para proporcionar una inmunidad colectiva. Esta última no puede lograrse sin aceptar el daño colateral de una importante mortalidad en la población susceptible y la sobrecarga de los sistemas de salud. En este contexto, las medidas de distanciamiento social, así como los esfuerzos para identificar y aislar nuevos casos y sus contactos son imprescindibles para el futuro control de la epidemia.

Referencias 

[1] Pollán M, Pérez-Gómez B, Pastor-Barriuso R, Oteo J, Hernán M, Pérez-Olmeda M, et al. Prevalence of SARS-CoV-2 in Spain (ENE-COVID): a nationwide, population-based seroepidemiological study. The Lancet, 2020. Doi: 10.1016/S0140-6736(20)31483-5