Dejar de fumar reduce también el riesgo de sufrir un segundo infarto o ictus 

Mujer joven con las manos en el pecho simulando un infarto

Está suficientemente constatado que el tabaquismo aumenta las probablidades de que una persona sufra un infarto, pero hay menos información sobre si dejar de fumar puede reducir el riesgo de sufrir un segundo infarto.  Una revisión Cochrane recién publicada quería averiguar si dejar de fumar después de un infarto puede reducir las posibilidades de sufrir más infartos u otro tipo de enfermedades relacionadas con el corazón o los vasos sanguíneos. Si realmente dejar de fumar previene la aparición de nuevas enfermedades, esto podría motivar a más personas a dejar de fumar y animar a personal médico y de enfermería a proporcionar un apoyo más activo para ayudar a las personas a dejar de fumar.

La principal conclusión de esta revisión es que las personas con enfermedades cardíacas que dejan de fumar tienen más probabilidades de reducir el riesgo de sufrir futuros infartos u otros episodios relacionados con el corazón o los vasos sanguíneos, como el ictus. Asimismo, la revisión indica que es poco probable que las personas con enfermedades cardíacas que dejan de fumar tengan una peor calidad de vida.

Cómo se hizo la revisión

Se buscaron estudios con al menos seis meses de duración y que incluyeran a personas diagnosticadas de enfermedades cardíacas que fumaran al inició del estudio. Los estudios también debían medir si las personas dejaban o no de fumar y si tenían o no otro episodio relacionado con el corazón o los vasos sanguíneos, como otro infarto o un ictus. En la revisión se incluyeron estudios publicados hasta el 15 de abril de 2021.

Qué se encontró

Se encontraron 68 estudios con 80 702 personas. La mayoría de los estudios incluyeron hombres y mujeres adultos de la población general; sin embargo, 11 estudios incluyeron sólo hombres. Se analizaron los resultados combinados de 60 estudios que midieron episodios relacionados con las enfermedades cardíacas y de ocho estudios que midieron la calidad de vida de las personas durante un período de seis meses o más.

Cuáles son los resultados de la revisión

En comparación con las personas que siguieron fumando, las personas que dejaron de fumar tuvieron un tercio menos de probabilidades de morir por enfermedad cardíaca o ictus (evidencia de 17 982 personas en 18 estudios) y un tercio menos de probabilidades de sufrir otro infarto o ictus (evidencia de 20 290 personas en 15 estudios). El grado de certeza de estos resultados fue entre moderado (muerte por enfermedad cardíaca o ictus) y bajo (muerte por enfermedad cardíaca o ictus, otro infarto u otro ictus), respectivamente.

La confianza en la solidez de los resultados se vio reducida por problemas relacionados con el diseño y la realización de algunos de los estudios. Sin embargo, cuando sólo se examinaron los estudios de mayor calidad, se siguió encontrando que las personas que dejaban de fumar tenían menos probabilidades de morir por enfermedad cardíaca o ictus. Esto indica que, aunque no se sepa seguro la magnitud de la reducción de las probabilidades de morir, es posible que las personas que dejan de fumar reduzcan en cierta medida sus probabilidades de morir por enfermedad cardíaca o ictus. Se encontraron resultados similares en cuanto a la disminución de la probabilidad de morir por cualquier causa, de sufrir otro infarto que no conduzca a la muerte y de sufrir un ictus que no conduzca a la muerte.

Los resultados también sugieren que las personas que dejaron de fumar tuvieron una mejoría en la calidad de vida en comparación con las que siguieron fumando después de ser diagnosticadas con una enfermedad cardíaca.

Referencia

Wu AD, Lindson N, Hartmann-Boyce J, Wahedi A, Hajizadeh A, Theodoulou A, Thomas ET, Lee C, Aveyard P. Smoking cessation for secondary prevention of cardiovascular disease. Cochrane Database of Systematic Reviews 2022, Issue 8. Art. No.: CD014936. DOI: 10.1002/14651858.CD014936.pub2