Con motivo de la actualización de una revisión sistemática sobre Intervenciones físicas para interrumpir o reducir la propagación de los virus respiratorios, la Biblioteca Cochrane ha publicado hoy un editorial en el que enfatiza que los políticos y responsables de formular las políticas de salud pública en relación con la pandemia de covid-19 deben tomar decisiones a partir de pruebas incompletas, ya que las evidencias disponibles siguen siendo de baja calidad y referidas en buena medida a otros virus en condiciones no pandémicas.
La conclusión de esta y otras revisiones sistemáticas realizadas por Cochrane en los últimos meses sobre la eficacia de las medidas físicas (uso de máscarillas, lavado de manos, distanciamiento físico, cuarentena, rastreo de contactos, detección y restricciones de viaje) ofrecen conclusiones similares: ninguna revisión ha encontrado pruebas sólidas y de alta calidad para ninguna medida relacionada con el comportamiento de la gente, ya que en cada una de estas revisiones se han identificado importantes limitaciones.
Sin embargo, “la falta de pruebas de eficacia no prueba que las intervenciones sean ineficaces. Más bien, los detalles de estas revisiones muestran por qué tal vez nunca haya pruebas sólidas sobre la eficacia de las medidas individuales cuando se despliegan, a menudo de forma combinada, en una población general que vive en las complejas y diversas circunstancias de la vida cotidiana”, señala el editorial del número de noviembre de Cochrane Database of Systematic Reviews.
Como explica Lisa Bero, una de las autoras del editorial, “la mayoría de los ensayos analizaron los efectos de medidas como las mascarillas faciales y el lavado de manos por sí solos; sin embargo, ninguna medida aislada será suficiente para reducir la propagación de la covid-19. Los encargados de tomar decisiones en materia de salud pública deben tener en cuenta todas las pruebas disponibles, y es probable que tengan que actuar sobre la base de pruebas inciertas cuando una intervención tenga el potencial de proteger la salud de grandes poblaciones y no sea probable que cause daños muy graves".