Declaración de Cochrane ante la 73ª Asamblea de la OMS

Cochrane ha presentado una declaración ante la 73ª edición de Asamblea Mundial de la Salud (WHA) de la OMS, celebrada los días 18 y 19 de mayo, y centrada este año  en la pandemia de la COVID-19. En la declaración se destaca el valor de las políticas de salud basadas en la evidencia y, dado el gran volumen de investigación en curso relacionada con la pandemia, llama a los Estados miembros a garantizar la transparencia de los ensayos y apoyar la síntesis de evidencia. La WHA es el órgano decisorio de la OMS, a la que asisten representantes de todos los Estados miembros. 

Esta es la declaración completa de Cochrane:

La pandemia de la COVID-19 resalta la importancia crítica de una política de salud global basada en la evidencia. Los gobiernos, profesionales de la salud e investigadores de todo el mundo están buscando respuestas a preguntas relacionadas con el tratamiento de los pacientes y la mejor manera de proteger a los trabajadores de la salud y al resto de ciudadanos.

Cochrane es líder mundial en sintetizar la evidencia de alta calidad para informar la toma de decisiones en salud. De esta manera, estamos trabajando estrechamente con la OMS produciendo revisiones rápidas para responder preguntas prioritarias relacionadas con la COVID-19, apoyando así el desarrollo de guías efectivas, tratamientos y respuestas costo-eficientes.

Sin embargo, el volumen y la calidad variable de la investigación que se publica relacionada con esta enfermedad representa un gran desafío en cuanto a sintetizar los resultados con exactitud. Cochrane ha identificado más de 4.000 estudios en humanos con COVID-19 ya en curso o publicados. Asimismo, ha lanzado uno de los registros de estudios sobre esta enfermedad más grandes y sofisticados y realiza una "síntesis viva" de los resultados que informa el "Plan de Investigación y Desarrollo" de la OMS. Además, Cochrane está produciendo "revisiones sistemáticas vivas" relevantes que permiten actualizaciones continuas a medida que se dispone de nuevos estudios.

En los próximos años se invertirán miles de millones de dólares en ensayos clínicos de la COVID-19. Pero sabemos que muchos ensayos clínicos nunca se registran o informan, un fenómeno que obstaculiza gravemente la toma de decisiones basadas en la mejor evidencia disponible. Ahora, más que nunca, es vital que se sigan las directrices de la OMS para la divulgación pública de los resultados de los ensayos clínicos. Sin datos de estudios accesibles y sin una síntesis y evaluación adecuadas, se desperdiciará gran parte de esta inversión.

Apelamos a los Estados miembros de la OMS a que apoyen la toma de decisiones informadas por la evidencia con medidas para salvaguardar la transparencia de los ensayos y para proporcionar una financiación suficiente para la síntesis de la evidencia.