Es común que los niños experimenten dolor a lo largo de su desarrollo, desde el nacimiento hasta pasada la adolescencia. Los lactantes, especialmente los prematuros, se someten con frecuencia a pruebas y procedimientos quirúrgicos. Mientras que los lactantes no pueden expresar el dolor de la misma manera que niños de mayor edad, es importante manejar el dolor, ya que las experiencias dolorosas repetidas en etapas tempranas de la vida están asociadas a alteraciones en la sensibilidad al dolor y las respuestas endocrinas al estrés y la ansiedad. [1]
Las vacunas infantiles protegen a los niños contra enfermedades, pero también pueden ser experiencias alarmantes tanto para el niño como para el profesional de la salud. Los niños que sufren experiencias negativas y angustiantes con las inyecciones pueden mostrarse reticentes a someterse a pruebas diagnósticas o recibir vacunas en el futuro. Sin embargo, las intervenciones psicológicas o las distracciones pueden reducir la ansiedad y el dolor asociado. [2]
La cirugía es otro tipo de intervención médica que puede producir dolor de gran intensidad y sufrimiento al niño. Los tratamientos farmacológicos o psicológicos para el dolor también pueden ayudar a los niños y adolescentes antes y después de la cirugía. El dolor puede continuar después del periodo de cicatrización y recuperación esperado y resultar en dolor postoperatorio crónico. Las terapias farmacológicas, así como las psicológicas pueden utilizarse para reducir la ansiedad antes y después de la cirugía para ayudar a recuperar el funcionamiento normal.
El dolor crónico es el dolor que dura más de tres meses. [3] El dolor crónico se da en al menos el 10% de los niños en edad preescolar y en el 30% de los adolescentes, [4] y puede ser angustiante tanto para el niño como para la familia. [5] Los tipos más comunes de dolor crónico durante la infancia incluyen las cefaleas, el dolor musculoesquelético, el dolor abdominal recurrente y el dolor neuropático. Asimismo, el dolor es asimismo un síntoma común de enfermedades como el cáncer o la artritis idiopática juvenil. El tratamiento del dolor en niños puede suponer un reto para médicos y otros profesionales de la salud. Las intervenciones farmacológicas suelen ser los tratamientos de primera línea, si bien las terapias psicológicas también se utilizan para disminuir el dolor y el sufrimiento de los niños y los profesionales sanitarios.
Esta Colección especial de Cochrane se centra en disminuir el dolor en lactantes, niños y adolescentes. La Colección recalca la última evidencia de tratamientos pediátricos para el dolor agudo y crónico para orientar la práctica clínica, política y financiación. Es importante tener en cuenta que la investigación sobre el dolor en poblaciones pediátricas y su financiación son a menudo insuficientes. Para llamar la atención sobre el déficit de evidencia de la efectividad (y cualquier efecto adverso asociado) de una intervención en niños, algunas de las revisiones de esta Colección Especial están “vacías”, lo que indica que no existen estudios con niños elegibles para su inclusión.
El grupo Cochrane Dolor, Apoyo y Curas Paliativas ha publicado las Revisiones Cochrane de esta Colección Especial. Las revisiones incluidas en la sección de tratamientos farmacológicos para el dolor crónico en niños y adolescentes se han incluido también en un resumen publicado en Dolor. [6] Para consultar más información sobre este tema, existe un Editorial Cochrane relacionada “Clinical management in an evidence vacuum: pharmacological management of children with persistent pain” y el blog Evidently Cochrane.
Dolor crónico
Intervenciones farmacológicas para el dolor crónico en niños y adolescentes
Las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre los tratamientos farmacológicos para el dolor persistente en niños reconocen que el dolor en niños es una preocupación de salud pública de gran importancia y trascendencia en la mayor parte del mundo.
Dolor crónico por causas diferentes al cáncer
Antidepresivos para el dolor crónico no relacionado con el cáncer en niños y adolescentes
Los antidepresivos se han usado en adultos para el alivio y tratamiento del dolor desde los años setenta. La amitriptilina es uno de los fármacos de uso más común para el tratamiento del dolor neuropático en el Reino Unido. El objetivo de esta revisión es evaluar la eficacia analgésica y los eventos adversos de los antidepresivos usados para tratar el dolor no relacionado con el cáncer en niños y adolescentes.
Fármacos antiepilépticos para el dolor crónico no relacionado con el cáncer en niños y adolescentes
Los fármacos antiepilépticos, desarrollados originalmente para tratar las convulsiones asociadas a la epilepsia, se han utilizado en los últimos años como analgésicos en adultos para muchas afecciones dolorosas crónicas, y ahora se recomiendan para el tratamiento del dolor crónico en la lista de la OMS de medicamentos esenciales. Esta revisión evalúa la eficacia analgésica y los eventos adversos de los fármacos antiepilépticos usados para tratar el dolor no relacionado con el cáncer en niños y adolescentes
Los fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) se usan para tratar el dolor, reducir la fiebre y por sus propiedades antiinflamatorias. Se usan con frecuencia como parte del tratamiento del dolor pediátrico. El uso de fármacos antiinflamatorios no esteroideos está autorizado en la actualidad en países occidentales; sin embargo, no está permitido el uso en lactantes menores de tres meses. Esta revisión evalúa la eficacia analgésica y los eventos adversos de los AINE usados para tratar el dolor no relacionado con el cáncer en niños y adolescentes.
Opiáceos para el dolor crónico no relacionado con el cáncer en niños y adolescentes
Los opiáceos se usan en todo el mundo para el tratamiento del dolor. Los opiáceos están generalmente disponibles en el ámbito de la asistencia sanitaria en los países de ingresos más altos, aunque el acceso puede estar restringido en los países de ingresos bajos y medios. Los opiáceos se administran en dosis variables (en general basadas en el peso corporal para los pacientes pediátricos) de forma parenteral, transmucosa, transdérmica u oral. El objetivo de esta revisión es evaluar la eficacia analgésica y los eventos adversos de los opiáceos usados para tratar el dolor crónico no relacionado con el cáncer en niños y adolescentes. [revisión vacía]
El paracetamol (acetaminofeno) es uno de los analgésicos más ampliamente usados tanto en adultos como en niños, y es el único analgésico recomendado para niños de menos de tres meses de edad. El paracetamol ha resultado seguro en dosis apropiadas y controladas; sin embargo, la sobredosis o el abuso del fármaco puede resultar en efectos adversos en niños como insuficiencia hepática y renal. El objetivo de esta revisión es evaluar la eficacia analgésica y los eventos adversos del paracetamol usado para tratar el dolor no relacionado con el cáncer en niños y adolescentes. [revisión vacía]
Dolor crónico por cáncer
Como una de las principales causas de mortalidad y morbilidad en niños y adultos en todo el mundo, el cáncer infantil (y el dolor asociado) es una preocupación de salud de carácter mayor. El dolor por cáncer es un síntoma importante y angustiante que tiende a aumentar en frecuencia e intensidad a medida que el cáncer avanza. El dolor por cáncer en lactantes, niños y adolescentes es fundamentalmente nociceptivo con efectos negativos a largo plazo.
Buprenorfina para el tratamiento del dolor por cáncer
Muchos pacientes con cáncer experimentan dolor de moderado a grave que requiere tratamiento con analgésicos potentes. La buprenorfina, el fentanilo y la morfina son ejemplos de opiáceos fuertes que se utilizan para el alivio del dolor por cáncer. Sin embargo, los opiáceos fuertes no son eficaces para el dolor en todos los pacientes ni son bien tolerados por todos los pacientes. El objetivo de esta revisión es evaluar si la buprenorfina se asocia con un alivio del dolor y una tolerabilidad superiores, inferiores o iguales en comparación con otras opciones de analgésicos en niños y adultos con dolor por cáncer. [revisión vacía]
Codeína, sola o con paracetamol (acetaminofeno) para el dolor por cáncer
Los analgésicos opioides, incluida la codeína, desempeñan un papel considerable en las guías más importantes sobre el tratamiento del dolor por cáncer, en especial el dolor leve a moderado. La codeína está ampliamente disponible y no es costosa, lo que la convierte en una buena opción, sobre todo en contextos de escasos recursos. Su administración genera controversia, en parte porque la codeína no es efectiva en una minoría de los pacientes que no logran convertirla en su metabolito activo (morfina) y también porque existe la preocupación sobre su posible abuso y su seguridad en niños. El objetivo de esta revisión es determinar la eficacia y la seguridad de la codeína utilizada sola o combinada con paracetamol para aliviar el dolor por cáncer. [revisión vacía]
Hidromorfona para el dolor por cáncer
En el caso de cáncer avanzado, la prevalencia del dolor puede ser muy alta , y entre el 75% y el 90% de los pacientes con cáncer describen que el dolor que presentan tiene una repercusión importante sobre su vida cotidiana. El dolor no controlado puede dar lugar a trastornos físicos y psicológicos, por lo que puede tener un efecto drástico sobre la calidad de vida de los pacientes. El objetivo de esta revisión es determinar la eficacia analgésica de la hidromorfona en el alivio del dolor por cáncer, así como la incidencia y la gravedad de cualquier evento adverso. [revisión vacía]
La metadona es un opiáceo sintético que presenta algunos retos en cuanto al ajuste de la dosis y del que se reconoce que puede causar arritmias potencialmente letales en algunos pacientes. Sí tiene un lugar en las terapias para las personas que no toleran otros opiáceos, si bien solamente los médicos experimentados deben iniciar este tratamiento. El objetivo de esta revisión es determinar la eficacia y tolerabilidad de la metadona como un analgésico en adultos y niños con dolor por cáncer. [revisión vacía]
Opiáceos para el dolor relacionado con el cáncer en niños y adolescentes
Los opiáceos se usan en todo el mundo para el tratamiento del dolor. Los opiáceos actualmente disponibles en el Reino Unido incluyen: buprenorfina, codeína, fentanil, hidromorfona, metadona, morfina, oxicodona y tramadol. Por lo general, los opiáceos están disponibles en ámbitos sanitarios de países más desarrollados, pero el acceso puede estar restringido en los países en desarrollo. Para conseguir una analgesia suficiente en niños mediante el uso de opiáceos, con un nivel aceptable de efectos adversos, el método recomendado es comenzar con una dosis baja, que se ajusta gradualmente para alcanzar el efecto o hasta que aparezcan efectos adversos inaceptables en el niño. Esta revisión evalúa la eficacia analgésica y los eventos adversos de los opiáceos para el tratamiento del dolor por cáncer en niños y adolescentes. [revisión vacía]
Morfina oral para el dolor por cáncer
La morfina se ha utilizado durante muchos años para aliviar el dolor. La morfina oral en sus formas de liberación inmediata o de liberación modificada continúa siendo el analgésico elegido para aliviar el dolor por cáncer moderado o intenso. El objetivo de esta revisión es determinar la eficacia de la morfina oral para el alivio del dolor por cáncer y evaluar la incidencia y la gravedad de los eventos adversos. [revisión vacía]
Tramadol con o sin paracetamol (acetaminofeno) para el dolor por cáncer
El tramadol es un analgésico opiáceo con uso autorizado para el dolor de moderado a intenso. Se considera de bajo riesgo de abuso, de manera que las normas de control no son tan estrictas como para los opiáceos "potentes", por ejemplo la morfina. Tiene una función potencial como segundo escalón en la escalera analgésica de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esta revisión evalúa los beneficios y los efectos adversos del tramadol con o sin paracetamol (acetaminofeno) para el dolor relacionado con el cáncer. [revisión vacía]
Los fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) se usan para tratar el dolor, reducir la fiebre y por sus propiedades antiinflamatorias. Se usan con frecuencia como parte del tratamiento del dolor pediátrico. El uso de AINE está autorizado en la actualidad en países occidentales; sin embargo, no está permitido el uso en lactantes menores de tres meses. Los efectos adversos primarios son: trastornos gastrointestinales y posible insuficiencia renal con el uso a largo plazo. Otros efectos adversos en los niños son: diarrea, cefalea, náuseas, estreñimiento, erupción cutánea, mareos y dolor abdominal. Esta revisión evalúa la eficacia analgésica y los eventos adversos de los fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) usados para tratar el dolor relacionado con el cáncer en niños y adolescentes. [revisión vacía]
Paracetamol (acetaminofeno) oral para el dolor por cáncer
Los fármacos no opiáceos se usan con frecuencia para tratar el dolor por cáncer leve a moderado, y se recomiendan para esta finalidad en la escalera de tratamiento del dolor por cáncer de la OMS, ya sea solos o en combinación con opiáceos. Esta revisión evalúa la eficacia del paracetamol (acetaminofeno) oral para el dolor por cáncer en adultos y niños, y los eventos adversos informados durante su uso en los ensayos clínicos. [revisión vacía]
Dolor crónico y dolor por cáncer
El dolor es uno de los síntomas más frecuentes en niños y jóvenes con afecciones que limitan la vida (ALV) y que incluyen varios diagnósticos, como el cáncer. La bibliografía actual indica que el dolor no recibe el tratamiento adecuado; sin embargo, la base de pruebas para guiar a los médicos es limitada. Existe una clara necesidad de pruebas de una revisión sistemática sobre las que basar la prescripción y, por ello, esta revisión evalúa las pruebas sobre la efectividad de diferentes intervenciones farmacológicas utilizadas para el dolor en niños y jóvenes con afecciones que limitan la vida. [revisión vacía]
Intervenciones psicológicas para tratar el dolor crónico en niños y adolescentes
Las intervenciones psicológicas, principalmente la terapia conductual cognitiva, se utilizan para disminuir la discapacidad, el dolor, la ansiedad y la depresión en niños con dolor crónico.
Intervenciones psicológicas para los padres de niños y adolescentes con enfermedades crónicas
Las terapias psicológicas para padres de niños y adolescentes con enfermedades crónicas intentan mejorar el comportamiento de los padres y su salud mental, la función (comportamiento/discapacidad, salud mental y síntomas médicos) de los niños y el funcionamiento familiar. Esta revisión evalúa la eficacia y los eventos adversos de las terapias psicológicas para los padres de niños y adolescentes con enfermedades crónicas (incluido el dolor crónico).
Terapias psicológicas para el tratamiento del dolor crónico y recurrente en niño/as y adolescentes
El objetivo primario de esta revisión es determinar el efecto de la terapia psicológica sobre los resultados clínicos, tales como la intensidad del dolor y la discapacidad para el dolor crónico y recurrente en niño/as y adolescentes en comparación con el tratamiento activo, la lista de espera o el tratamiento habitual. Asimismo, examina la repercusión de las terapias psicológicas en los síntomas depresivos y los síntomas de ansiedad en niño/as y determinar los eventos adversos.
Las terapias psicológicas que tradicionalmente se han realizado cara a cara con un terapeuta son eficaces para reducir la intensidad del dolor y la discapacidad. Se está utilizando la tecnología para llevar a cabo estas terapias psicológicas en remoto y así eliminar las barreras de acceso al tratamiento como el coste o la distancia. Las terapias realizadas en remoto a través de Internet, programas informáticos y aplicaciones de teléfonos móviles pueden emplearse para proporcionar tratamiento a niños y adolescentes con dolor crónico. El objetivo de esta revisión es determinar la eficacia de las terapias psicológicas realizadas en remoto en comparación con la lista de espera, el tratamiento habitual o tratamientos control activos para el tratamiento del dolor crónico en niños y adolescentes.
Dolor agudo
Intervenciones farmacológicas para tratar el dolor postoperatorio agudo en niños y adolescentes
Nalbufina para el tratamiento del dolor posoperatorio en niños
Los opioides se usan con poca frecuencia para el tratamiento del dolor postoperatorio en los niños debido al temor a los eventos adversos. Un opioide de uso sistémico que existe desde hace mucho tiempo es la nalbufina, un agonista del receptor kappa y antagonista del receptor µ. Se cree que la eficacia de la nalbufina es similar a la de la morfina. El aumento de la dosificación podría dar lugar a un efecto de techo y por lo tanto, a menos analgesia de la esperada. Esta revisión evalúa la eficacia y los eventos adversos de la nalbufina para el tratamiento del dolor postoperatorio agudo en niños sometidos a cirugía.
Tramadol for postoperative pain treatment in children
El dolor postoperatorio en los niños todavía es un grave problema, principalmente porque se evitan los opiáceos. Una de las razones por las que se evitan es el temor a los eventos adversos graves después de la administración de un opiáceo. El tramadol es un agonista µ ‐opioide débil e inhibe la recaptación de la noradrenalina y la serotonina (5HT) y debido a una ventana terapéutica relativamente amplia y a un efecto máximo con un riesgo menor de eventos adversos graves es ampliamente utilizado en los niños. Esta revisión evalúa la efectividad y el perfil de los efectos secundarios del tramadol para el alivio del dolor postoperatorio en niños y adolescentes a los que se les realizan diferentes procedimientos quirúrgicos.
El dolor postoperatorio agudo ocurre como resultado del daño tisular tras una cirugía. La administración de analgesia apropiada a los niños es un proceso complejo y no está claro si el dolor postoperatorio en esta población se trata de forma más exitosa al utilizar la administración de analgesia a demanda (cuando hay dolor) o en un esquema fijo continuo independientemente del dolor en el momento de la administración. El objetivo de esta revisión es evaluar la eficacia de la administración de analgésicos según necesidad versus según un esquema fijo para el tratamiento del dolor postoperatorio en niños menores de 16 años de edad.
Fármacos para el tratamiento agudo de la migraña en niños y adolescentes
Numerosos fármacos están disponibles para el tratamiento agudo de la migraña en adultos, y algunos se han aprobado actualmente para su uso en niños y adolescentes. El objetivo de esta revisión es evaluar los efectos de las intervenciones farmacológicas por cualquier vía de administración versus placebo para la migraña en niños y adolescentes para ayudar a los médicos tomar decisiones terapéuticas informadas en la evidencia.
El labio leporino es uno de los defectos congénitos craneofaciales más frecuentes y requiere corrección quirúrgica precoz en la niñez. Según lo que se espera después de una cirugía en un área tan sensible y delicada, el período postoperatorio inmediato a la reparación de labio leporino se puede asociar con un dolor de moderado a intenso. Se utilizó el bloqueo nervioso infraorbitario asociado con anestesia general para aliviar el dolor postoperatorio después de la reparación de labio leporino en niños. Esta revisión evalúa los efectos del bloqueo nervioso infraorbitario para el dolor postoperatorio posterior a la reparación de labio leporino en niños.
Ketorolaco para el dolor posoperatorio en niños
Los niños sometidos a procedimientos quirúrgicos en ámbitos ambulatorios y de hospitalización están en riesgo de presentar dolor agudo. Los fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) pueden reducir el dolor moderado a intenso sin muchos de los efectos secundarios asociados con los opiáceos. Sin embargo, los AINE pueden causar sangrado, toxicidad renal y gastrointestinal, y retrasar potencialmente la curación ósea y de la herida. La administración intravenosa de ketorolaco para el dolor postoperatorio en los niños no ha sido aprobada en muchos países, pero se administra de forma habitual en la práctica clínica. Esta revisión evalúa la eficacia y la seguridad del ketorolaco para el dolor postoperatorio en los niños.
Intervenciones psicológicas para tratar el dolor relacionado con procedimientos en niños y adolescentes
El dolor y el malestar de los procedimientos relacionados con agujas son frecuentes durante la niñez y se pueden aliviar mediante la administración de intervenciones psicológicas (estrategias cognitivas o conductuales, o ambas). Esta revisión evalúa la eficacia de las intervenciones psicológicas para el dolor y el malestar relacionados con procedimientos en los que se utilizan agujas en niños y adolescentes.
Otras intervenciones para tratar el dolor relacionado con procedimientos en lactantes y en niños de corta edad
Tamaño de la aguja para los procedimientos de vacunación en niños y adolescentes
Se recomienda que muchas vacunas se administren con inyección intramuscular, aunque algunas son administradas por vía subcutánea e intradérmica (en la piel). En los procedimientos de vacunación se pueden utilizar agujas hipodérmicas de diferentes tamaños. La elección de una aguja de longitud y calibre apropiados puede ser importante para asegurar que una vacuna se aplique en el sitio apropiado y produzca la máxima respuesta inmunitaria, a la vez que causa el menor daño posible. Hay algunas guías contradictorias con respecto a los tamaños de las agujas que se deben utilizar para vacunar a los niños y adolescentes. Esta revisión evalúa los efectos del uso de agujas de diferentes tamaños para administrar vacunas a niños y adolescentes sobre la inmunogenicidad de la vacuna, el dolor del procedimiento y otros eventos de adversos.
El dolor agudo y el sufrimiento en lactantes son comunes. El dolor no aliviado y el sufrimiento pueden tener consecuencias a lo largo de su vida. Esta revisión evalúa la eficacia de intervenciones no farmacológicas para el dolor agudo en niños y lactantes, excluyendo la música y el método madre canguro.
Existe gran evidencia sobre los efectos analgésicos de las soluciones con sabor dulce para recién nacidos y lactantes. No es tan seguro que existan los mismos efectos analgésicos en niños y adolescentes. El objetivo de esta revisión es determinar la eficacia de las soluciones o sustancias con sabor dulce para disminuir el dolor relacionado con procedimientos con agujas en niños de más de un año de edad.
References
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2. Birnie KA, Noel M, Chambers CT, Uman LS, Parker JA. Psychological interventions for needle-related procedural pain and distress in children and adolescents. Cochrane Database Systematic Reviews 2018;10:CD005179. https://doi.org/10.1002/14651858.CD005179.pub4/full
3. Treede RD, Rief W, Barke A, Aziz Q, Bennett MI, Benoliel R, et al. A classification of chronic pain for ICD-11. Pain 2015;156(6):1003-7. https://doi.org/10.1016/S0304-3959(00)00269-4
4. Perquin CW, Hazebroek-Kampschreur AAJM, Hunfeld JA, Bohnen AM, van Suijlekom-Smit LWA, Passchier J, et al. Pain in children and adolescents: a common experience. Pain 2000;87(1):51-8. https://doi.org/10.1016/S0304-3959(00)00269-4
5. Palermo TM, Valrie CR, Karlson CW. Family and parent influences on pediatric chronic pain: a developmental perspective. American Psychologist 2014;69(2):142-52. http://dx.doi.org/10.1037/a0035216
6. Eccleston C, Fisher E, Cooper T, Grégoire MC, Heathcote LC, Krane E, et al. Pharmacological interventions for chronic pain in children and adolescents: an overview of systematic reviews. Pain 2019