Proporcionar a las mujeres un apoyo adicional organizado probablemente les ayuda a dar el pecho a sus hijos durante más tiempo. Esta es la principal conclusión de una actualización de una revisión Cochrane, que indica además que el apoyo a la lactancia materna podría ser más útil si se programan de cuatro a ocho visitas. La revisión también señala que no parece haber diferencias con respecto a quién proporciona el apoyo (es decir, profesional o no profesional) ni cómo se proporciona (en persona, por teléfono, con tecnologías digitales o combinado). De hecho, es posible que se necesiten diferentes tipos de apoyo en diferentes puntos geográficos para satisfacer las necesidades de las personas que se encuentran en ese lugar. Es necesario seguir trabajando para identificar los componentes de las intervenciones eficaces y realizarlas a mayor escala.
A continuación, se detallan algunos aspectos destacados de esta revisión:
¿Cuál es el problema?
La Organización Mundial de la Salud recomienda que los lactantes sean alimentados exclusivamente con leche materna hasta los seis meses de vida y que la lactancia materna continúe como parte importante de la dieta del lactante hasta que tenga por lo menos dos años de edad. Se sabe que la lactancia materna es buena para la salud a corto y largo plazo tanto de los lactantes como de sus madres. Los bebés son menos propensos a desarrollar infecciones pulmonares o intestinales. También es menos probable que tengan sobrepeso y que desarrollen diabetes en el futuro. Las madres son menos propensas a desarrollar diabetes y a sufrir cáncer de mama u ovario. Es posible que muchas madres dejen de amamantar antes de lo que les gustaría como resultado de los problemas que encuentran. Una buena atención y un buen apoyo podrían ayudar a las mujeres a superar las dificultades y a ganar confianza para poder seguir amamantando.
Esta revisión analizó si la prestación de apoyo organizado adicional a las madres que dan el pecho las ayudaría a continuar amamantando en comparación con la atención materna estándar. Esta revisión se centró en el apoyo de profesionales sanitarios, incluidas matronas, enfermeras y médicas, o de trabajadores no técnicos formados, como los trabajadores y voluntarios no técnicos de la comunidad.
¿Por qué es esto importante?
Sabiendo qué tipo de apoyo se puede proporcionar para ayudar a las madres con la lactancia, es posible ayudarlas a seguir amamantando durante el tiempo que quieran, dondequiera que vivan. Abandonar la lactancia antes de tiempo podría causar decepción, depresión y angustia duraderas en las madres y problemas de salud para ellas y sus hijos. El apoyo puede proporcionarse dando confianza, elogios, información y la posibilidad de que las mujeres comenten sus dudas y hagan las preguntas que consideren necesarias.
¿Qué evidencia se encontró?
Se hicieron búsquedas de evidencia el 11 mayo de 2021. Esta revisión actualizada incluye ahora 116 estudios controlados aleatorizados, de los cuales 103 ensayos han contribuido a los análisis, procedentes de 42 países y en los que participaron 98 816 mujeres y sus bebés. Alrededor del 55% de las mujeres procedían de países de ingresos altos, el 37% de países de ingresos medios y el 8% de países de ingresos bajos.
En esta actualización de la revisión, las intervenciones se agruparon en dos categorías diferentes. El primer grupo, «solo a la lactancia materna», incluyó las intervenciones que solo contenían apoyo a la lactancia. En el segundo grupo, el apoyo a la lactancia materna fue una parte de una intervención más amplia que también tenía como objetivo proporcionar otros beneficios para la salud de la madre o del bebé (p. ej., vacunas, cuidado del recién nacido). A estas intervenciones se les llamó «lactancia materna plus».
En general, estos ensayos mostraron que es probable que menos mujeres que recibieron una intervención de apoyo «solo a la lactancia materna» abandonaran la lactancia materna exclusiva en cualquier momento hasta los seis meses inclusive. El efecto fue mayor entre las cuatro a seis semanas y los tres a cuatro meses, donde se calcula que probablemente un 17% y un 19% menos de mujeres dejarían la lactancia materna exclusiva. El efecto fue menor a los seis meses, donde se calcula que un 10% menos de mujeres probablemente dejaría de amamantar exclusivamente.
Las pruebas también indican que las mujeres que reciben apoyo «solo a la lactancia materna» probablemente tengan menos probabilidades de interrumpir la lactancia materna hasta los seis meses inclusive. De nuevo, el efecto fue mayor entre las cuatro a seis semanas y los tres a cuatro meses, donde se calcula que probablemente un 12% y un 13% menos de mujeres abandonaría cualquier lactancia materna. A los seis meses se calcula que un 7% menos de mujeres dejaría de amamantar. No hubo suficientes estudios para mostrar si las intervenciones de apoyo «solo a la lactancia materna» podían reducir el número de mujeres que dejan de dar el pecho a los nueve o a los 12 meses.
En el caso de las mujeres que recibieron intervenciones de «lactancia materna plus», las pruebas son menos claras. Las mujeres que reciben apoyo «lactancia materna plus» podrían tener un 27% menos de probabilidades de dejar la lactancia materna exclusiva a las cuatro a seis semanas (evidencia de certeza muy baja). Asimismo, los datos indican que un 21% menos de mujeres podrían dejar la lactancia materna exclusiva a los seis meses. El efecto sobre cualquier tipo de lactancia materna fue menor, ya que se calcula que un 6% menos de mujeres probablemente dejó de dar el pecho a los seis meses. No está claro si las intervenciones de «lactancia materna plus» reducen el número de mujeres que abandonan cualquier tipo de lactancia materna o la lactancia materna exclusiva en los otros momentos examinados.
Faltan pruebas claras sobre los factores que podrían ayudar a las mujeres a dar el pecho durante más tiempo. Sin embargo, un programa específico de entre cuatro y ocho contactos podría ayudar a aumentar el número de mujeres que dan el pecho de forma exclusiva a las cuatro a seis semanas o a los seis meses cuando reciben una intervención de «solo a la lactancia materna».
En el caso de las intervenciones de apoyo «solo a la lactancia materna», en general se consideró que las pruebas eran de certeza moderada. Esto significa que existe una confianza moderada en los resultados. En el caso de las intervenciones de apoyo «lactancia materna plus», la calidad de las pruebas fue más contradictoria y la certeza varió entre moderada y muy baja.