Una reciente revisión Cochrane ha evaluado la eficacia de las medidas no farmacológicas, como restringir las visitas o hacer pruebas periódicas, para prevenir la covid-19 en los centros de atención de larga estancia (residencias). La principal conclusión de esta revisión es que estas medidas podrían prevenir las infecciones por SARS‐CoV‐2 (causante de la enfermedad covid‐19) en los residentes y el personal de los centros de atención de larga estancia, pero preocupa la fiabilidad de los resultados. En este sentido, los autores de la revisión señalan que se necesitan más estudios de alta calidad sobre experiencias en la vida real. Asimismo, se necesitan más estudios de investigación sobre medidas de centros en los que la mayoría de los residentes y el personal esté vacunada, así como en regiones que no sean Norteamérica y Europa.
A continuación se resumen en términos sencillos otros aspectos de esta revisión:
¿Qué son las medidas no farmacológicas?
Las medidas no farmacológicas son formas de prevenir o reducir las enfermedades sin utilizar medicamentos, como las vacunas. Entre ellas se incluyen el control de los movimientos y contactos de las personas, el uso de equipos de protección individual (EPI) o la realización de pruebas periódicas para detectar infecciones.
El SARS‐CoV‐2 es muy infeccioso. Las personas mayores o discapacitadas que viven en residencias son vulnerables a las infecciones porque viven en contacto estrecho con otras personas, con cuidadores y visitantes que entran y salen del centro. Debido a la edad y a los problemas de salud subyacentes, los residentes de estos centros tienen un mayor riesgo de enfermar gravemente de covid‐19 y de morir a causa de la enfermedad.
¿Qué se quería averiguar?
Se quiso averiguar la eficacia de las medidas no farmacológicas para evitar que los residentes y el personal de los centros de atención de larga estancia se contagien con el SARS‐CoV‐2 y para reducir la propagación de la infección. Esta revisión se centró en todos los tipos de centros de atención de larga estancia para adultos, como las residencias de ancianos y los centros especializados en atención a personas con discapacidades.
¿Qué se hizo?
Se buscaron estudios que investigaran los efectos de medidas no farmacológicas en centros de atención de larga estancia. Para ser incluidos, los estudios debían informar del número de infecciones, hospitalizaciones o muertes que las medidas habían evitado en los residentes o en el personal, o si las medidas habían evitado la introducción del virus en los centros o los brotes dentro de los mismos. Se incluyó cualquier tipo de estudio, también estudios observacionales que utilizaran datos del “mundo real" o estudios de modelización basados en datos hipotéticos de simulaciones generadas por ordenador.
¿Qué se encontró?
Se encontraron 22 estudios, 11 observacionales y 11 de modelización. Todos los estudios fueron realizados en Norteamérica o Europa.
Hubo cuatro tipos principales de medidas.
- Medidas de regulación del acceso para evitar que los residentes, el personal o los visitantes introduzcan el virus en el centro. Las medidas incluían el confinamiento del personal con los residentes, la cuarentena de los residentes recién ingresados, la realización de pruebas a los nuevos ingresos, no permitir el ingreso de nuevos residentes e impedir la entrada de visitantes en las instalaciones.
- Medidas de regulación del contacto y de reducción de la transmisión para evitar que las personas se transmitan el virus. Las medidas incluían el uso de mascarillas o EPI, la distancia social, la limpieza adicional, la reducción del contacto entre residentes y entre el personal, y la colocación de los residentes y el personal en grupos de atención y la limitación del contacto entre los grupos.
- Medidas de vigilancia diseñadas para identificar un brote al inicio. Las medidas incluían hacer pruebas periódicas a los residentes o al personal, independientemente de los síntomas, y hacer pruebas basadas en los síntomas.
- Medidas de control de brotes para reducir las consecuencias de un brote. Las medidas incluían el aislamiento de los residentes contagiados y separar a los residentes contagiados o al personal que los atiende de los no contagiados.
Algunos estudios utilizaron una combinación de estas medidas.
Resultados principales
Medidas de regulación del acceso (cuatro estudios observacionales; cuatro estudios de modelización).
La mayoría de los estudios mostraron que dichas medidas eran beneficiosas, pero algunos estudios no encontraron efectos o encontraron efectos no deseados, como la depresión y la confusión entre los residentes en el contexto de las restricciones a las visitas.
Medidas de regulación del contacto y de reducción de la transmisión (seis estudios observacionales; dos estudios de modelización)
Algunas medidas podrían ser beneficiosas, pero a menudo la evidencia es muy poco clara.
Medidas de vigilancia (dos estudios observacionales; seis estudios de modelización)
La realización de pruebas periódicas a los residentes y al personal podría reducir el número infecciones, hospitalizaciones y de muertes entre los residentes, pero la evidencia sobre la cifra de muertes entre el personal estuvo menos clara. Se predijo que hacer pruebas con más frecuencia, obtener resultados más rápido y utilizar pruebas más precisas tendría efectos más beneficiosos.
Medidas de control de brotes (cuatro estudios observacionales; tres estudios de modelización)
Estas medidas podrían reducir el número de infecciones y el riesgo de brotes en los centros, pero a menudo la evidencia es muy poco clara.
Medidas combinadas (dos estudios observacionales; un estudio de modelización)
La combinación de diferentes medidas podría ser efectiva para reducir el número de infecciones y muertes.
¿Cuáles son las limitaciones de la evidencia?
La confianza en estos resultados es limitada. Muchos estudios utilizaron predicciones matemáticas en lugar de datos reales, y no se puede confiar en que las suposiciones del modelo sean exactas. La mayoría de estudios observacionales no utilizaron la metodología más fiable. Esto significa que no es posible asegurar que la medida causara el efecto, por ejemplo, que hacer pruebas a los residentes haya reducido el número de muertes.
¿Cuál es el grado de actualización de esta evidencia?
La revisión incluye estudios publicados hasta el 22 de enero de 2021.
Referencia
Stratil JM, Biallas RL, Burns J, Arnold L, Geffert K, Kunzler AM, Monsef I, Stadelmaier J, Wabnitz K, Litwin T, Kreutz C, Boger AH, Lindner S, Verboom B, Voss S, Movsisyan A. Non‐pharmacological measures implemented in the setting of long‐term care facilities to prevent SARS‐CoV‐2 infections and their consequences: a rapid review. Cochrane Database of Systematic Reviews 2021, Issue 9. Art. No.: CD015085. DOI: 10.1002/14651858.CD015085.pub2
17.09.2021